La APC denuncia el nefasto ejemplo de precarización que supone la convocatoria de la Consejería de Igualdad y pide que la rectifique

El pliego ofrece retribuciones mileuristas y minusvalora el trabajo profesional cualificado de la comunicación

La Asociación de la Prensa de Cádiz considera un “nefasto ejemplo” y un “desprecio” que minusvalora el trabajo de los periodistas y profesionales de la comunicación la convocatoria de un contrato de servicio de asistencia técnica de comunicación por parte de la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta de Andalucía publicada el día 6 de abril para las diferentes delegaciones territoriales de la región. La APC, al igual que otras asociaciones de la prensa andaluzas y el Colegio de Periodistas de Andalucía, muestra su malestar y pide que esta convocatoria se rectifique y se sustituya por una en la que las funciones estén bien delimitadas, retribuidas de manera digna y acorde con la cualificación que es precisa para este trabajo, y que en ningún caso sirva de artimaña legal para reemplazar lo que debería ser un puesto estructural de comunicación en la administración pública.

Las administraciones púbicas han de ser el espejo en que muchas empresas privadas se miren a la hora de cuantificar y elaborar sus contrataciones para profesionalizar su comunicación. Con esta licitación se hace un flaco favor a los colectivos profesionales en la lucha por conseguir condiciones de trabajo dignas en un mercado con insoportables tasas de paro y altamente precarizado. 

La APC coincide con la opinión del Colegio de Periodistas, que la califica de “totalmente inasumible, temeraria y contraria a los intereses de cualquier trabajador, sea por cuenta propia o ajena” y que afirma que “la Consejería va a crear falsos autónomos mileuristas para trabajar 24/7”.

Tras valorar los pliegos del contrato queda clara la necesidad de dotar de personal al gabinete de comunicación y prensa de cada delegación, de hecho, el pliego lo denomina así: “gabinete de comunicación y prensa”, para realizar todas las funciones propias de un gabinete de comunicación, compuesto por varias personas con perfiles completamente diferentes: periodista, fotógrafo, diseñador gráfico, cámara… Es lo que las organizaciones colegiales vienen llamando “periodistas orquesta, la demostración pura de la precariedad laboral a la que se somete a una profesión vilipendiada, una vez más, incluso desde las administraciones públicas”. 

A la Asociación de la Prensa le parece además una tomadura de pelo que la Consejería no haya cumplido su compromiso de modificar y revisar tanto la cantidad económica como las funciones a desempeñar en la prestación de este servicio de comunicación cualificado para una administración pública, tras retirar una convocatoria anterior cuyas carencias son casi las mismas que las del nuevo documento, entre ellas, la idéntica retribución.