La presa gaditana planta cara a los reiterados retrasos en las convocatorias de prensa

Hartos de esperar, los trabajadores de los medios de comunicación que cubren la actualidad de Cádiz y provincia manifiestan su profundo malestar por la continua ausencia de puntualidad de los cargos públicos. Tal es así que la Asociación de la Prensa de Cádiz mantiene desde el pasado mes de marzo una campaña en sus redes sociales para señalar a los representantes públicos que no llegan en hora.

Todas las semanas sufren esta falta de programación y respeto que se hacen insoportables cuando las administraciones lo toman como un hábito. Los periodistas gaditanos se han propuesto acabar con estas malas prácticas que traen consigo el abandono de otras convocatorias y ocasionan el estrés de los profesionales que han de adaptarse a las parrillas de sus medios.

La Asociación de la Prensa de Cádiz y la Demarcación Territorial del Colegio de Periodistas exigen que se respete la agenda y el trabajo de los profesionales de la información. Bajo la etiqueta #PuntualesConLaprensa los periodistas comparten en sus redes sociales fotografías del lugar de la convocatoria de prensa y los minutos que llevan esperando la comparecencia. Esta queja pública es el primer paso antes de animar a los trabajadores de los medios a plantar a todos aquellos que acumulen reiterados retrasos.

La APC exige a los medios el respeto a los derechos de los becarios

El personal en prácticas no puede asumir responsabilidades fuera de sus competencias y su trabajo debe estar remunerado

La Asociación de la Prensa de Cádiz y la demarcación gaditana del Colegio Profesional de Periodistas de Andalucía recuerda a los medios de comunicación que estos meses acogen a personal en prácticas en sus redacciones que deben respetar las condiciones laborales de los becarios. Este periodo de formación práctica debe ser remunerado, y con tareas de acuerdo a su estatus dentro de la plantilla.

Esto quiere decir que estos trabajadores, normalmente jóvenes a punto de finalizar sus estudios o con su titulación recién adquirida, no pueden asumir responsabilidades que se escapan a su formación y experiencia. Los becarios se integran en las redacciones para aprender y ser formados, no para ser utilizados como mano de obra barata.

La crisis que durante años está acechando a los medios de comunicación, que en la mayoría de ocasiones les ha llevado a reducir plantilla, aumenta el riesgo de caer en malas prácticas con este personal. En ocasiones se pretende que el trabajo de los becarios sirva para suplir al de redactores con experiencia a quienes se ha obligado a dejar sus puestos. De este modo, los medios comenten una injusticia con sus becarios, a quienes les exigen unas tareas para las que no están contratados, y con su público, puesto que no pueden garantizar la calidad de sus contenidos.

Las organizaciones de periodistas de Cádiz recuerdan también que los periodos de prácticas deben ser limitados en el tiempo. Se trata de que los nuevos periodistas adquieran una formación sobre el terreno, pero que, una vez superado el tiempo, puedan acceder al mercado laboral en condiciones normales. No es de recibo que se mantenga con el estatus de becario durante meses, incluso años, a algunos trabajadores, que se ven incluso obligados a matricularse en nuevas asignaturas o másteres universitarios para poder seguir siendo contratados en prácticas.

Al igual que hace la FAPE, la APC y el Colegio de Periodistas invitan y recomiendan a los becarios que sientan vulnerados sus derechos a denunciar la situación.

El personal en prácticas no puede asumir responsabilidades fuera de sus competencias y su trabajo debe estar remunerado

Ladrones de talento

La Asociación de la Prensa de Cádiz y la demarcación gaditana del Colegio Profesional de Periodistas de Andalucía recuerda a los medios de comunicación que estos meses acogen a personal en prácticas en sus redacciones que deben respetar las condiciones laborales de los becarios. Este periodo de formación práctica debe ser remunerado, y con tareas de acuerdo a su estatus dentro de la plantilla.

Esto quiere decir que estos trabajadores, normalmente jóvenes a punto de finalizar sus estudios o con su titulación recién adquirida, no pueden asumir responsabilidades que se escapan a su formación y experiencia. Los becarios se integran en las redacciones para aprender y ser formados, no para ser utilizados como mano de obra barata.

La crisis que durante años está acechando a los medios de comunicación, que en la mayoría de ocasiones les ha llevado a reducir plantilla, aumenta el riesgo de caer en malas prácticas con este personal. En ocasiones se pretende que el trabajo de los becarios sirva para suplir al de redactores con experiencia a quienes se ha obligado a dejar sus puestos. De este modo, los medios comenten una injusticia con sus becarios, a quienes les exigen unas tareas para las que no están contratados, y con su público, puesto que no pueden garantizar la calidad de sus contenidos.

Las organizaciones de periodistas de Cádiz recuerdan también que los periodos de prácticas deben ser limitados en el tiempo. Se trata de que los nuevos periodistas adquieran una formación sobre el terreno, pero que, una vez superado el tiempo, puedan acceder al mercado laboral en condiciones normales. No es de recibo que se mantenga con el estatus de becario durante meses, incluso años, a algunos trabajadores, que se ven incluso obligados a matricularse en nuevas asignaturas o másteres universitarios para poder seguir siendo contratados en prácticas.

Al igual que hace la FAPE, la APC y el Colegio de Periodistas invitan y recomiendan a los becarios que sientan vulnerados sus derechos a denunciar la situación.

El personal en prácticas no puede asumir responsabilidades fuera de sus competencias y su trabajo debe estar remunerado